Una cápsula (en ocasiones llamado cartucho fonográfico o cartucho phono) es, en su forma más básica, un transductor electromecánico. Convierte el movimiento mecánico de la aguja en el surco del disco en una señal eléctrica. Existen dos diseños básicos de una cápsula: imán móvil y bobina móvil.

En una cápsula de imán móvil, la aguja se desplaza por el surco de un disco, transfiriendo su fuerza mecánica del voladizo a un imán conectado al otro extremo.

En una cápsula de bobina móvil, el proceso mecánico es opuesto al que se encuentra en un diseño de imán móvil. La fuerza mecánica de la aguja se transfiere hasta el voladizo y a la bobina en lugar de a un imán.

La finalidad de una aguja es recorrer el surco del disco capturando el movimiento, que a continuación se transfiere a una señal eléctrica dentro de la cápsula. Audio-Technica produce agujas en cinco formas distintas (cónica, elíptica, Microlinear, Shibata y contacto de línea especial) que entran en contacto con el surco del disco y capturan el movimiento de distintas maneras, creando características de sonido únicas.

La aguja cónica es la más sencilla y la más utilizada. Su punta esférica normalmente toca el centro de las paredes del surco del disco. Está especialmente indicada para giradiscos y configuraciones de audio de precio bajo a medio. También resulta ideal para discos mono (vinilo con un canal) y los antiguos discos de 78 rpm. Sin embargo, su forma le impide entrar en contacto detallado con mucha parte de las paredes del surco del disco, ofreciendo menos fidelidad.

La aguja elíptica consta de dos radios, siendo el delantero más ancho que el lateral. El radio delantero se apoya en el centro del surco, mientras que el radio lateral, más pequeño, hace más contacto con las paredes del surco. Un mayor contacto con las paredes del surco del disco ofrece mayor nivel de fidelidad.

La aguja Microlinear imita casi exactamente la forma de los punzones que se utilizan para grabar el disco máster original (el disco que se utiliza para crear el disco de vinilo prensado). Este parecido le permite entrar en contacto con partes de los surcos que otras agujas no alcanzan y, de este modo, reproducir los pasajes de agudos con extremada precisión y ofrecer una respuesta de frecuencia plana en el rango audible. Su exclusiva forma multicapa se desgasta con mayor uniformidad, lo que prolonga la vida de los discos y las agujas de forma considerable.

La aguja Shibata fue desarrollada originalmente para reproducir discos de vinilo de cuatro canales (cuadrafónicos). La aguja Shibata (o multirradial) también consta de dos radios, de forma similar a la aguja elíptica. Sin embargo, los radios de la aguja Shibata permiten una mayor superficie de contacto y una captación eficaz de las frecuencias más altas con una mejor adaptación al surco y una menor distorsión.

La aguja  Special Line Contact está diseñada para seguir los surcos del disco con gran precisión, lo que se traduce en una extraordinaria respuesta a frecuentas altas, baja distorsión y mínima abrasión. Este tipo de aguja permite más contacto con la superficie que cualquier otra forma de aguja. Cabe precisar que debido a su alta fidelidad, la aguja de contacto de línea puede generar más ruido en discos muy desgastados. La punta de contacto de línea se utiliza en nuestras cápsulas de alta gama.

El vástago de la aguja es la pieza que conecta la aguja al voladizo. Un vástago redondo puede ser más difícil de alinear cuando se coloca en el voladizo. Es necesaria una alineación adecuada para posicionar la punta de la aguja adecuadamente en el surco del disco.

En una aguja adherida (o articulada), una punta de diamante está pegada a un vástago metálico que a su vez está pegado al orificio del voladizo. Aunque es más barata de fabricar, esta construcción puede aumentar el peso de la punta en su conjunto e influir en la respuesta a transitorios en comparación con una aguja desnuda en la que la punta y el vástago está fabricados como una sola pieza de diamante.